Mª Mar Durán del Amor
Actualmente, el dióxido de carbono (CO2) es uno de los principales contribuyentes al calentamiento global, no obstante, su abundancia en el medio ambiente, el bajo costo que presenta y el hecho de ser un gas renovable lo han convertido en una materia prima muy atractiva para la obtención química de productos de alto valor. La formación catalítica de carbonatos cíclicos a partir de la cicloadición de CO2 con epóxidos es uno de los enfoques más prometedores en la tecnología de captura y conversión de CO2 (CCC) que ha conseguido industrializarse a través de catalizadores homogéneos. Sin embargo, el proceso requiere altas temperaturas y presiones, y la separación del producto es difícil y costosa, por lo que es necesario buscar una alternativa.
Recientemente, los investigadores Song Tu y Jun Li de la Universidad de Xiamen (China) han descrito[1] el desarrollo de un catalizador heterogéneo para la formación de carbonatos cíclicos en condiciones suaves: un MPIL o poli (líquido iónico) mesoporoso hiperreticulado. Los poli (líquidos iónicos) (PIL), son polielectrolitos compuestos por una columna vertebral polimérica y unidades monoméricas repetidas de un líquido iónico (IL), de esta forma combinan las ventajas de los IL (fuertes interacciones electrostáticas y de van der Waals) y de los polímeros, superando los problemas de la alta viscosidad y separación del catalizador para los IL. Además, el catalizador deberá presentar una estructura mesoporosa, ya que un tamaño de poro más grande acelerará el transporte de masa y energía, y un elevado grado de reticulación para mejorar su área de superficie específica y aumentar su densidad iónica, favoreciendo la adsorción de CO2 y la actividad catalítica al proporcionar mayor número de sitios activos.
En esta investigación,[1] se preparó una familia de MPILs en forma de esponja con diferentes densidades iónicas mediante polimerización en masa sol-gel por radicales libres de monómeros catiónicos múltiples basados en imidazolio. Los monómeros se produjeron a partir de la reacción de 1,2,3,4,5,6-hexakis(bromometil)benceno, 1,2,4,5-tetrakis (bromometil)benceno y 1,3,5-tris (bromometilo) con 1-vinil-1H-imidazol (VIm-n siendo n =6, 4, 3, número de grupos 1-vinil-1H-imidazolio sustituidos) bajo protección de N2 a temperatura ambiente, obteniendo PVIm-6-SCD, PVIm-4-SCD y PVIm-3-SCD de alta pureza, respectivamente. Finalmente, se sometieron a un secado supercrítico con CO2 (SCD) que por su papel protector de poros dotó de un área de superficie específica y porosidad alta, un tamaño de poro grande y nanoestructuras bien definidas a los catalizadores.
El PVIm-6-SCD, que presentaba la densidad iónica más alta (seis pares de iones), resultó ser el catalizador más eficiente: mostró una adsorción sin precedentes de CO2 de 3.60 mmol/ g a 273 K y 1 atm y una excelente actividad catalítica en la cicloadición de CO2 con epiclorhidrina a presión ambiente, temperatura relativamente baja (1 atm, 50 ° C, 24 h), sin disolventes, sin metales y sin aditivos.
Finalmente, para explorar el alcance del sustrato de PVIm-6-SCD para carbonatos cíclicos, se realizó la cicloadición de CO2 con otros epóxidos: óxido de propileno, sustratos alifáticos de cadena larga, epóxidos inertes… obteniendo excelentes rendimientos (> 95%) en condiciones suaves.
Concluyendo que el PVIm-6-SCD presenta una alta compatibilidad de sustrato, una estabilidad térmica satisfactoria, una excelente actividad, selectividad y elevado rendimiento catalítico, además de poder ser separado y reutilizado hasta seis veces sin una pérdida significativa de actividad. Todo ello lo convierte en un catalizador heterogéneo ideal, efectivo y sostenible para la ciclación de epóxidos.